« Venus Marte »
Earth
Un Vistazo a la Tierra
Nombre
del inglés antiguo
Distancia media al Sol
92,955,820 millas
149,597,890 km
1 Unidad Astronómica
Masa
1 masa terrestre
5,973,700 x 1021 kg
Diámetro del ecuador
7,926 millas
12,756 km
Duración del día 
24 horas
Duración del año
365.24 días terrestres
Lunas conocidas
1
Planetas cuadro comparativo
La Tierra y la Luna

Sabemos que nuestro mundo es una morada para la vida.  La Tierra está repleta de peces, mamíferos, pájaros, reptiles, insectos, incluso extraños “extremófilos” –formas de vida en unos medios de condiciones extremas, como a gran profundidad en el hielo polar o en torno a zonas de agua caliente en el fondo del océano.  La diversidad de vida en la Tierra y su capacidad de adaptación a condiciones extremas, lleva a muchos científicos actuales a pensar que la vida podría florecer en otras zonas del sistema solar, o en planetas y lunas en torno a otras estrellas en nuestra galaxia, la Vía Láctea.

Infrared image of Earth from orbit.

El agua templada brilla con un resplandor rojo en esta imagen infrarroja tomada desde la órbita de la Tierra.  El agua templada es parte de El Niño, que altera los patrones de temperaturas en Norteamérica.

Pero sólo a partir  del siglo dieciséis, en la época de Copérnico, se empezó a ver a la Tierra como un planeta –similar a los “trotamundos” a los que se veía atravesar el cielo nocturno sobre el fondo fijo de estrellas.  Desde entonces, los estudios con telescopios y con sondas de otros cuerpos del sistema solar han situado a nuestro notable mundo en un contexto más amplio.

Sabemos que la Tierra es el más grande de los planetas “terrestres” de nuestro sistema solar –los cuatro planetas rocosos próximos al Sol.

El eje de la Tierra tiene una inclinación de 23.5 grados, lo que produce las estaciones.  Cuando uno de los hemisferios está inclinado hacia el Sol, experimenta el verano.  El hemisferio alejado del Sol experimenta el invierno.  La primavera y el otoño ocurren cuando los hemisferios están entre estos dos extremos. 

La Tierra es el único planeta donde el espectro normal de temperaturas permite que exista agua líquida en su superficie.  De hecho, los océanos cubren el 70 por ciento de la superficie de la Tierra. 

Éste es un factor clave para la vida que conocemos.

La atmósfera de la Tierra es otro factor que hace posible la vida.  Consta de un 78 por ciento de nitrógeno, un 21 por ciento de oxígeno y rastros de otros gases, y proporciona protección de casi toda la radiación dañina del Sol.  También nos protege de los meteoros que se dirigen al planeta y que se consumen en la atmósfera antes de alcanzar la superficie.

Las porciones sólidas de la Tierra forman tres capas.  La capa superior es la corteza, y está compuesta de silicatos –rocas como cuarzo, feldespato y otras.  Debajo de la corteza se halla el manto, que contiene la mayor parte de la masa de la Tierra.  El manto contiene principalmente silicio, magnesio y oxígeno.   El manto envuelve un núcleo de dos capas: una capa exterior de hierro y níquel parcialmente fundida, y una capa interior de hierro sólido.  Al rotar la Tierra, estas capas giran con ritmos diferentes, lo que genera el campo magnético de nuestro planeta.

Los siete continentes de la Tierra se asientan en grandes placas tectónicas que flotan encima del manto.  Hace varios eones, los continentes estaban unidos en una sola masa terrestre que los científicos denominan Pangea.  Hace unos 200 millones de años, las placas empezaron a moverse, haciendo que los continentes se separaran.  Todavía siguen moviéndose hoy, pero de manera muy lenta.  Los terremotos ocurren cuando las placas tectónicas colisionan y una fuerza a la otra a deslizarse debajo de ella.

Un Vistazo a la Luna

Distancia media a la Tierra
238,855 milllas
384,400 km
Diámetro del ecuador
2,159 millas
3,475 km
Duración del día
27.3 días terrestres
Gravedad en la superficie
17 por ciento de la terrestre
Lunas Cuadro
La Luna de la Tierra

La acompañante de la Tierra en su viaje alrededor del Sol, la Luna, está geológicamente muerta.  Su superficie está cubierta de campos de lava seca, llamados “mares,” y de cráteres de impacto.  Los mares se formaron hace unos cuatro mil millones de años, cuando asteroides gigantescos abrieron agujeros en la corteza de la Luna, permitiendo que roca fundida saliera a la superficie, donde se enfrió y endureció. 

Apollo lunar module on the Moon.Las montañas de Taurus-Littrow dejan pequeño a Challenger (en el centro), el lander lunar del Apolo 17.

La Tierra y la Luna tienen más de planeta doble que de un planeta y una luna.  La Luna es bastante grande en relación con la Tierra –aproximadamente un cuarto del diámetro de la Tierra.  Hay interacción gravitacional entre las dos, dando lugar al conocido efecto de las mareas.

La interacción tiene otras consecuencias importantes.  Con el paso del tiempo, las rotaciones de la Luna se han asentado, y siempre tenemos al mismo lado de la Luna mirando hacia la Tierra.  La Luna, además, contribuye a estabilizar el “bamboleo” en el eje de la Tierra.  Durante miles de millones de años, esto ha resultado en un clima más estable y más acogedor para la evolución de la vida.  La fuerza de gravedad de la Luna sobre la Tierra también hace que, a lo largo de un siglo, la rotación de la Tierra disminuya en unos dos milisegundos al día.

La Luna probablemente se formó en un gran “coscorrón.” 

La teoría surgió cuando los científicos analizaron las rocas traídas a la Tierra por los astronautas del Apolo y las sondas soviéticas Luna, así como las lecturas de los sismómetros puestos en la superficie lunar para registrar los “lunamotos (sismos lunares).” 

Sus estudios mostraron que la composición de la Luna se parece mucho a la del manto y la corteza de la Tierra.  A partir de ello, los científicos concluyeron que un cuerpo del tamaño de Marte se estrelló en la Tierra unos millones de años después de que ésta se formara.  El impacto vaporizó gran parte de los materiales del manto y la corteza de la Tierra y los lanzó al espacio, formando un anillo alrededor del planeta.  Este material se aglutinó rápidamente para formar la Luna –una acompañante estable para la Tierra en su interminable viaje alrededor del Sol.